Eres la brisa…

Autor: Fray Alejandro R. Ferreirós OFMConv

 

 

Eres la brisa que en la noche ignota
acerca el perfume más sublime,
la esencia penetrante que redime
y el sinsabor de la maldad derrota.

Eres la llama que el Amor enciende
el fuego en que se quema mi brasero
la chispa de la vida en que me muevo
la brasa del ardor que me trasciende.

Eres el agua cristalina y pura
en que mi sed se sacia cada día
y eres frescura inusitada y viva
que devuelve al desierto la hermosura.

Eres el nido que el Amor contiene,
el verso vivo que la paz denota
cuando reparas mi vasija rota
y el sino de la muerte se detiene.

Palabra Eterna que en Amor se ofrece
en fuente viva que el Amor provoca
savia de vida que mi anhelo invoca
arrojo de virtud que me engrandece.

Efímera es la vida que te ofrece
el mundo y sus placeres pasajeros,
hay otros rumbos, otros derroteros
en el tiempo fugitivo que acontece.

Yo Soy la vida, la Verdad que permanece
Soy el aliento verde de tu huerto,
la virtud que te alienta, el riego cierto
luz eterna que nunca palidece.

Aferrado a la vida que te ofrezco
encontrarás mi paz en tus senderos
y el soplo de mi Amor será el lucero
que te dirá que nunca palidezco.

Yo Soy tu paz en tierra desolada.
Soy la quietud que invade tu semblante
frescura de un rocío penetrante
que se queda en tu alma restaurada.

Yo Soy tu compañero y soy tu guía
el candil encendido de tus ruegos
la luna, por la noche, en el sendero,
impulso de tu lenta travesía.

Soy Señor y Espíritu escondido
a los ojos sin fe que no perciben
y en los tuyos, mis gracias se conciben,
Soy el don que te ha sido prometido.