Deportistas Millonarios                   Autor: Manolo J. Campa

Escribo sobre el polo… no el del norte, tampoco el del sur. Me refiero al pasatiempo
que requiere jugadores a caballo. El polo es un deporte parecido al “hockey”. En vez de
jugarse sobre el hielo montado en patines, se juega sobre la hierba montado a caballo.
Los jinetes se protegen la cabeza con unos cascos parecidos a los “hard hats” que usan
los obreros de la construcción y le dan estacazos a una bola con unos palos de trapear
amarrados a la muñeca. Los cronistas deportivos dicen que es un deporte de
millonarios.

El béisbol de Grandes Ligas, hoy también es un deporte de millonarios. Algunos
jugadores que son “estrellas” robando bases, bateando la pelota sobre las cercas de los
estadios y “empujando” carreras en números que rompen “records”, reciben sueldos de
muchos millones... ganan más que el presidente de la nación.

La pelota de ahora es un deporte caro. Ya no se puede ver un juego por uno o dos
dólares desde las gradas de sol en el “right field”. Los refrescos, las rositas de maíz y
los perros calientes cuestan tanto en el estadio como en los banquetes para opulentos
que celebran los partidos políticos para recaudar fondos para sus candidatos
presidenciales.

Hoy los profesionales del deporte de las bolas y los “strikes”, tienen un ajuar más
completo que el de una “niña bien” para su boda. Se protegen la cabeza con una gorra y
un casco parecido al de los trogloditas del fútbol americano. La gorra para darle sombra
a los ojos cuando juegan a la defensiva, “al campo”. El casco protector para batear y
correr las bases llevando el “güiro” (cráneo) resguardado.

Las manos también se las protegen con dos tipos de guantes. Para coger la pelota usan
el guante tradicional, pero ahora diseñado por un grupo colegiado de ortopédicos,
escultores, ingenieros, peleteros, modistos y manicuristas. Al ir a batear se cubren las
manos con unos guantes ajustados como los que usan las mujeres pudientes para
manejar o cuidar las rosas del jardín.

Visten los pantalones de los uniformes tan apretados que parecen calzoncillos largos.
La región del cuerpo donde la espalda pierde su nombre, y que recibe el impacto al
deslizarse sobre la arenilla de las bases, se protege con unas almohaditas cosidas a los
pantalones ajustados, creando la misma ilusión óptica que dejaba la “engañadora”
cuando nos pasaba por delante, allá por Prado y Neptuno, en la feliz Habana de
entonces.

Como mis ingresos de jubilado no me permiten asistir a los juegos de las Grandes Ligas,
me contento presenciando los juegos de la Liga Infantil de mi vecindario. Mi jugador
favorito es un peloterito de unos cuatro años de edad, llamado Danny. Es una ardilla en
el terreno. Juega con una “pimienta” y un coraje admirables. Cuando logra hacer
contacto con la pelota, corre como un perseguido hacia la primera base… aunque haya
sido “out” él sigue corriendo hacia la segunda y hacia la tercera base donde el “coach”
lo detiene y lo saca del terreno. A la defensiva, en el “right field”, siempre atento a la
jugada, se coloca inclinado con las manos en las rodillas, en pose típica de “outfielder”
de Grandes Ligas.

Confieso que me siento identificado con este pequeño atleta porque su uniforme le viste
con la misma holgura con que yo visto mis trajes y guayaberas. Véase foto de Danny en
segunda base con su uniforme y su casco que le hacen lucir como un pequeño astronauta
vestido de pelotero.

EN SERIO:

Gobernantes izquierdistas de América Latina quieren cubanizar a sus países. ¡Están
locos! ¿Ignoran lo que pasa en Cuba? Allí la libertad y los derechos civiles no existen.
Los beneficios los disfrutan sólo los que mandan… el resto vive muriendo, careciendo
de todo. ¿Cómo es posible que quieran para sus pueblos las privaciones, el atraso y las
ruinas que padece el pueblo cubano?

Hay tiranuelos sin conciencia, que engañando a sus pueblos logran llegar al poder para
perpetuarse en el mismo gobernando “a lo Fidel”. Por eso desde sus campañas
electorales y sus discursos desde las sillas presidenciales, presentan una Cuba
paradisíaca muy diferente a la que se desintegra bajo el régimen totalitario de Castro.

Con la intención de presentar, una vez más, la verdadera situación de los cubanos bajo
el comunismo castrista, solicité y recibí autorización del Comité de Información sobre
Cuba para reproducir la denuncia publicada en importantes periódicos chilenos en los
días finales de la Conferencia de La Cumbre de las Américas. Dice así:

En Cuba… no hay sindicatos libres; los cubanos no tienen derecho a la huelga, ni
siquiera contra el extranjero que los explote… los extranjeros pueden ser dueños de
negocios y los cubanos no. Estos extranjeros, dueños de negocios, pagan al gobierno de
Castro en dólares por el trabajo de los obreros y el gobierno paga a los obreros en pesos
cubanos sin poder de compra.
… de las tiendas y mercados (que pertenecen todas al Estado) las abastecidas venden
solamente en dólares, por lo que los obreros no pueden comprar en ellas… los cubanos
no pueden entrar en muchos hoteles porque éstos… son sólo para turistas extranjeros.

En Cuba… hay el mayor número per cápita de cárceles del continente, donde se han
cumplido las sentencias de cárcel política más largas del mundo -¡hasta 30 años!-,
donde ha habido el mayor número de presos políticos de América, donde ha existido el
mayor número de mujeres en prisión política del mundo y donde han sido fusilados
miles por luchar contra la tiranía de Castro.
… se ha entrenado, financiado y protegido cuanto movimiento guerrillero ha enlutado
tantos países de nuestra América.
… no existe una prensa libre, sólo la del gobierno.
… hay el mayor número de exiliados políticos y el mayor índice de suicidios de nuestra
América.

En Cuba… un país eminentemente agrícola, hasta las frutas y los vegetales están
racionados desde hace 47 años. ¿No es esto debido a la ineficiencia administrativa y a la
corrupción de la nueva clase gobernante?
…ciertas carreras universitarias son solamente para los integrados al gobierno y los
estudiantes tienen que trabajar sin paga (trabajo esclavo) en labores agrícolas.
… existe un solo partido político y no se han celebrado elecciones pluripartidistas en los
últimos 47 años.
… el pueblo arriesga la vida por escapar en balsas o en cualquier objeto que flote y de
hecho han muerto miles de cubanos de esta forma.
… han proliferado la prostitución y la pedofilia para turismo sexual, con la tolerancia,
estímulo y beneficio económico del gobierno castrista.