Aborto y depresión

Autor: Martha Morales

 

 

Una cantidad creciente de estudios –elaborados en los últimos diez años- encuentra una fuerte relación entre aborto, depresión y otras enfermedades psiquiátricas, dijo el doctor David Reardon (Elliot Institute News dreardon@mine4ever.net). Muchos médicos encuentran tendencias suicidas en algunas mujeres que han abortado porque no han superado el Síndrome post-aborto. 

San Pío de Pietrelcina decía: “El aborto no es sólo homicidio, sino también suicidio… Entenderían este suicidio de la raza humana si vieran ‘la belleza y la alegría’ de la tierra poblada de ancianos y despoblada de niños: quemada como un desierto. Con el aborto se mutila también la vida de los padres. A estos padres les quisiera impregnar con las cenizas de sus fetos destruidos, para clavarlos en sus responsabilidades y para negarles la posibilidad de apelar a su ignorancia… Las aprensiones del orden médico también participan en este envejecimiento de la tierra”. 

Las mujeres que se someten a un aborto pueden acabar sufriendo problemas mentales, ha advertido el Colegio Real de Psiquiatras del Reino Unido en 2008. La polémica en torno al aborto se agudizó después de que se examinase el caso de una artista prometedora que se ahorcó porque no pudo superar el dolor por haber abortado de dos gemelos. La artista, Emma Beck, de 30 años, dejó una nota en la que se arrepentía de haber abortado y afirmaba que vivir se había vuelto para ella un 'infierno'.  

Cualquier intervención quirúrgica implica SANGRE. La matriz, es el lugar donde más sangre acumula una mujer embarazada, pues es el alimento de su bebé (esa es la causa de la menstruación). Un aborto es sangriento por naturaleza. ¿Sabe la mujer que se puede desangrar tanto en una clínica “legal” como en una “ilegal”?... 

Está claro que los que están en los gobiernos saben poco de matemáticas. Si así fuera, no dedicarían tantos esfuerzos ni tantos recursos a financiar el aborto. Se ha demostrado que después de practicarse un aborto, más pronto o más tarde, la mujer padecerá el Sindrome post-aborto, algo parecido a una depresión grave. Así pues, dicha mujer faltará al trabajo, necesitará atención médica, además de rehabilitación personal... En cambio, traer un niño al mundo y mantenerlo cuesta mucho menos.  

Además, las mujeres que han abortado sufren cambios repentinos de humor, “síndrome del Aniversario”, problemas de identidad sexual (psiquiatra Jesús Poveda), depresión, pesadillas... Al 52% de las mujeres encuestadas les molesta ver mujeres embarazadas. El 45% de ellas daría marcha atrás si pudiera. En el 50% de los casos, la relación de la pareja termina. 

En resumen, S. Juan Bautista a los seis meses de embarazo ya es el profeta que anuncia al Mesías, y el propio Salvador ya lo es cuando sólo lleva cinco días en el seno de María. Así la Biblia coincide con la ciencia mostrando que la vida humana comienza en el instante de la concepción. Y el aborto queda incluido en el precepto "no matarás".