Una hecatombe silenciosa: los embriones que mueren en la fecundaci�n artificial

Autor: Padre Fernando Pascual, L.C.

Fuente: catholic.net (con permiso del autor)

Se ha publicado recientemente un amplio estudio sobre las t�cnicas de

reproducci�n artificial en Europa, referidas al a�o 2000[1]. En el mismo se presta especial atenci�n a los datos relativos a dos t�cnicas: la fecundaci�n in vitro (FIV � IVF), y la inyecci�n intracitoplasm�tica de espermatozoides (ICSI), aunque tambi�n se habla de la transferencia de embriones descongelados.  

En el estudio se evidencian dos lagunas importantes que suelen ser comunes en este tipo de estad�sticas. La primera se refiere al n�mero total de embriones que han sido obtenidos en laboratorio, n�mero que no es recogido a lo largo del art�culo. La segunda, a lo que se hace con los embriones que no han sido implantados en cada ciclo de tratamiento.  

Estas dos omisiones permiten ocultar un aspecto que no todos conocen de las t�cnicas de reproducci�n artificial in vitro: la gran cantidad de embriones que morir�n o que ser�n congelados indefinidamente como parte de los procesos que se siguen, de un modo ya casi rutinario, para conseguir el nacimiento de un hijo a trav�s de la FIV o de la ICSI.  

A pesar de estas dos omisiones, el estudio no puede ocultar que un gran n�mero de embriones se pierden en el camino, como vamos a mostrar a continuaci�n.  

En las tablas VI y VII (pp. 494-495) se recogen las estad�sticas (no completas) de los embarazos y de los nacimientos producidos a partir de la FIV y del ICSI (por separado) en numerosos pa�ses de Europa. Vamos a tomar, como ejemplo, los datos que se refieren a Gran Breta�a.  

-Se recogen los informes de las 75 cl�nicas que recurren a la FIV y a la ICSI en la naci�n (cf. tabla I, p. 492).

-En el a�o 2000 se iniciaron 15694 ciclos de fertilidad para la FIV y 10645 para la ICSI.

-Se realizaron 14015 aspiraciones de �vulos para la FIV, y 10637 para la ICSI. Sumando las dos cifras, se realizaron 24652 aspiraciones. No se indica, sin embargo, cu�ntos �vulos fueron conseguidos en total, ni la media de �vulos aspirados por cada ciclo.

-Se omite, como dijimos antes, el n�mero de �vulos que fueron fecundados en laboratorio. Podr�amos suponer entre una “media baja” de 3 �vulos fecundados por ciclo (se tratar�a, por tanto, de unos 73000 embriones), y una “media alta” de 6 �vulos fecundados por ciclo (lo que dar�a unos 147000 embriones), pero las cifras podr�an ser m�s altas.

-En cuanto al n�mero de embriones transferidos, se suman los datos relativos a la FIV y a la ICSI que se ofrecen en la tabla V (p. 494), y obtenemos que fueron transferidos 51438 embriones. De nuevo, la pregunta: �cu�ntos embriones no fueron transferidos y qu� se hizo con ellos?

-El n�mero total de partos resultantes de esas transferencias fue de 4866 (seg�n la suma de lo indicado en las tablas V y VI, si bien en la tabla X se indica la cifra, quiz� por error, de 4856). Si tenemos en cuenta el elevado n�mero de partos gemelares, de dos o tres hijos (como se desglosa en la tabla X, p. 496), el n�mero total de ni�os nacidos se eleva a 6334 (cf. tambi�n la tabla XII, p. 497).  

Hasta aqu� los datos, referidos, como dijimos, s�lo a Gran Breta�a. Como dijimos, no sabemos cu�l fue el n�mero total de embriones obtenidos en el laboratorio, y cu�ntos embriones no fueron implantados. S� sabemos, y ya nos dice mucho sobre las t�cnicas usadas, que de los 51438 embriones transferidos en 22783 mujeres (cf. tabla V), s�lo llegaron a nacer 6334 hijos. En la �ltima etapa del camino (en el �tero de sus madres) murieron, por lo tanto, 45104 embriones.  

Los n�meros totales son mucho m�s altos. Si se suman los datos facilitados por algunos (no todos) de los laboratorios de los pa�ses que participaron en el estudio, resulta que de 398952 embriones transferidos despu�s de la FIV y de la ICSI nacieron s�lo 35928 ni�os (p. 492). Es decir, “se perdieron” en el �ltimo tramo de la t�cnica (no se nos dice nada de los embriones “perdidos” en el laboratorio) 363024 hijos.  

�Puede parecernos aceptable la muerte de tantos embriones? La pregunta no puede dejar indiferentes a los padres que recurren a las cl�nicas de reproducci�n artificial, ni a los mismos cient�ficos, ni a la sociedad. S�lo en Gran Breta�a, volvemos a recordarlo, tenemos la certeza de que han muerto “m�s” de 45104 embriones para conseguir 6334 hijos. M�s, s�, porque queda por averiguar, como hemos repetido varias veces, cu�ntos embriones mueren o son eliminados antes de ser transferidos al �tero de sus madres, y cu�ntos mueren a ra�z de los procesos de congelaci�n y descongelaci�n.  

La decisi�n m�s correcta para defender la dignidad de las v�ctimas y la de quienes provocan esta “hecatombe silenciosa” no puede ser m�s que una: dejar de recurrir a unas t�cnicas que no respetan el valor de la vida de tantos miles de hijos.

Un gesto valiente en favor de la dignidad de todo ser humano, desde su etapa embrionaria, deber�a llevarnos a la prohibici�n de cualquier forma de fecundaci�n extracorp�rea, se trate de la FIV o de la ICSI. Hace falta, por lo mismo, buscar alternativas m�s justas para ayudar a aquellas parejas que desean un hijo y no pueden conseguirlo, como, por ejemplo, la elaboraci�n de leyes que faciliten la adopci�n, o la promoci�n de una cultura que ayude a evitar comportamientos que ponen en peligro la fecundidad de la pareja.


[1] Cf. Assisted reproductive technology in Europa, 2000. Results generated from European registers by ESHRE, en Human Reproduction (http://humrep.oupjournals.org), vol. 19 (2004), pp. 490-503.