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POLÍTICA Y RELIGIÓN
Buena parte de los problemas que agobian a los ser humano procede de la falsa
y exagerado opinión que nos hemos forjado sobre nuestra razón e inteligencia.
Error que consiste en creer que ella lo puede todo, que no admite límites. Y los
tiene, y muchos.
Cierto que el hombre es un animal racional, pero sólo algunos y en algunas
ocasiones razonan ”razonablemente”. La mayor parte apenas usamos la razón
más que en nuestra profesión y diversiones. Por otra parte, la razón es
fácilmente torcida con la mentira, los engaños, las tentaciones y nuestro propios
errores.
Los políticos son más proclives a la razón que a la fe , mientras los religiosos se
inclinan más por la fe que por la razón. La política se encarga de ordenar la vida
de los hombres en la tierra y, en la tierra pretenden implantar su paraíso
particular y temporal. La religión está empeñada en que vivamos en la tierra de
forma que al final podamos llegar a un paraíso eterno.
¿Son incompatibles? En teoría no, en la práctica unas veces si y otras no. Hablar
de política o Religión en abstracto conduce a poco o nada, pues tanto una como
la otra la hacen hombres imperfectos, buenos o malos, instruidos o no, llenos de
fobias y filias en quienes, generalmente, privan sus intereses particulares, de
partidos, religión y pueblo sobre cualquier otra consideración. En consecuencia,
es en los hombres y mujeres bien preparados y con buena moral o ética, que rija
sus acciones, en quienes tenemos que confiar y elegir.
Sin embargo, solo en las religiones descansa la moral que nos obliga en
conciencia. Puestos a elegir, sobre todas ellas se eleva, sin comparación, la
moral cristiana. Por algo se ataca tanto a la Iglesia. Si esta cayese,
desparecerían todos los enemigos de los poderosos gobernantes que no admiten
ninguna cortapisa a sus caprichos. La Iglesia es la última barrera que se opone a
los sin Dios, que desean ser dioses.
La historia nos recuerda que todo pueblo que ha apartado a Dios de su horizonte,
aquellos en que las leyes divinas han sido sustituidas “totalmente” por las
humanas han desembocado en verdaderos infiernos. El comunismo ateo dejó
tras si, en medio mundo, más de doscientos millones de cadáveres caídos en
combate, muertos de hambre o fusilados por sus propios conciudadanos. La
tierra se convirtió en una inmensa tumba. Tras unos años de relativa paz,
¿volvemos a las andadas?
Hasta la revolución francesa era la Iglesia quien marcaba la Agenda de la Política
en Europa y quien la ha seguido marcando en el mundo musulmán hasta hoy, en
que los musulmanes han dicho: ¡ Se acabó! En estos cambios los europeos y
musulmanes vivieron y empiezan a vivir de forma diferente. Las elecciones están
a la vista ¿ Quienes serán los nuevos gobernantes ? ¿ Se someterán a Dios y al
pueblo o pretenderán ser adorados como dioses ? Nosotros elegimos (?)
Recordemos que
“La Iglesia de Pedro, es la única institución mundial que ha
podido ir a rezar a la tumba de “todos” sus enemigos”
Alejo Fernández Pérez
Alejo1926@gmail.com
Mérida (España), 22 de febrero de 2011