Errores modernos en la Iglesia
católica
P. Fernando Pascual
26-10-2023
A lo largo de su historia, la
Iglesia católica ha sufrido la invasión de errores más o menos graves que
ponían en peligro la verdadera doctrina, recibida gracias a la Revelación.
Hubo errores ya en las
primeras comunidades, que fueron denunciados por san Pablo y san Juan. Hubo
errores, posteriormente, en los siglos de los Santos Padres, algunos sumamente
graves, como el arrianismo que fue aceptado por muchos obispos.
En el mundo moderno fueron
llegando, como oleadas, ideas y doctrinas erróneas, que no pocos católicos
aceptaron sin darse cuenta, o, por desgracia, con cierta conciencia
distorsionada que las asumía alegremente.
Entre esos errores causaron
grandes daños el racionalismo y el empirismo, con sus peligros subjetivistas;
el Iluminismo, con su sueño de crear una nueva humanidad sin la ayuda de la
gracia; el liberalismo, soñador de un Estado que rompiese con cualquier lazo
respecto de la religión verdadera; el evolucionismo y el materialismo
ideológicos, que niegan la creación y la finalidad del universo.
En el siglo XX los viejos
errores encontraron nuevos compañeros: errores en la psicología, en la
sociología, en la política, en ideologías que exaltaban la raza, o una clase
social, o la revolución, o el sexo liberado, o la llegada de un hombre capaz de
crearse a sí mismo (el transhumanismo).
Sorprende ver cómo muchos
católicos, también entre ellos estudiosos, teólogos, pastores, sucumbían a esos
errores, se convertían en sus nuevos profetas, y desorientaban a los demás.
No faltaron voces que
denunciaron algunos errores, incluso desde intervenciones directas de varios
Papas, como Pío IX, Pío X, Pío XII, Juan Pablo II y Benedicto XVI, entre otros.
Pero en facultades de la
Iglesia, en seminarios, en cursos para laicos, los errores seguían
difundiéndose en el pasado, y también se difunden en nuestros días. Basta con
constatar, con sorpresa, cómo se ofrecen en librerías católicas, parroquias,
centros de espiritualidad, libros y cursos con ideas de la Nueva Era (New Age),
o con errores teológicos que niegan verdades fundamentales de la fe católica.
Para tener una visión más
amplia de los errores modernos que han afectado a miles de católicos en los
últimos siglos conservan un interés especial diversos libros de un converso
inglés, Philip Trower (1923-2019), y que pueden
leerse en inglés y en algunas recientes traducciones al español.
Entre esos libros son de gran
ayuda estos dos títulos: La Iglesia docta y la rebelión de los eruditos
(1979), y La Iglesia Católica y la contra-fe. Un
estudio del secularismo moderno, el relativismo y la descristianización
(2006).
Lo importante consiste en
tomar conciencia de esta situación para no dejarnos arrastrar por doctrinas
equivocadas, según el famoso consejo de san Pablo que recordó el cardenal
Ratzinger en la misa de inicio del cónclave de 2005 en el que luego fue elegido
papa como Benedicto XVI: “Para que no seamos ya niños, llevados a la deriva y
zarandeados por cualquier viento de doctrina, a merced de la malicia humana y
de la astucia que conduce engañosamente al error” (Ef
4,14).
De este modo, nos alejaremos
de los errores surgidos en el mundo moderno y que tanta fuerza tienen en
nuestro tiempo, y viviremos firmes en la fe y en la verdad (cf. 1Cor
16,13; 2Cor 1,24; 1Pe 5,9; 2Pe 1,12) que hemos recibido
como don de Dios en el seno de la Iglesia católica.