Promover la salud con justicia
P. Fernando Pascual
26-2-2022
Uno de los temas más complejos
consiste en promover la salud de modo eficaz, según los avances de la medicina
y la técnica, y hacer que la mayoría (ojalá todos) pueda tener acceso a lo que necesita
para vivir sanamente.
La realidad es que millones de
seres humanos no solo carecen de acceso a instrumentos modernos de alta
tecnología, sino que incluso no reciben tratamientos básicos y relativamente
fáciles de ofrecer a todos.
Constatar lo anterior vale
para situaciones de “normalidad”, cuando la vida de los pueblos se mueve según
velocidades diferentes, donde unos están muy bien atendidos, mientras que otros
no tienen calmantes, ni antibióticos, ni desinfectantes.
Vale también para situaciones
de emergencia, como cuando surge una pandemia que requiere un esfuerzo enorme
por parte de los gobiernos de todos los países para evitar los contagios y
atender a los contagiados.
Ese esfuerzo en situaciones de
pandemia no implica olvidar que sería desproporcionado invertir miles de
millones ante una pandemia ocasional, salvando a muchos seres humanos, mientras
que se invierte muy poco para ayudar a muchos otros seres humanos que mueren
por enfermedades fácilmente atendibles.
En un discurso pronunciado el
27 de septiembre de 2021, el Papa Francisco tocó en parte este tema, al
recordar cómo se pusieron en marcha enormes esfuerzos para contener la difusión
del Covid-19, al mismo tiempo que había millones de seres humanos sin el mínimo
acceso al agua potable.
Al respecto, decía el Papa:
“Por supuesto, hacemos bien en
tomar todas las medidas para contener y superar el Covid-19 a nivel mundial,
pero esta coyuntura histórica en la que nuestra salud se ve amenazada de cerca
debería hacernos conscientes de lo que significa ser vulnerable y vivir en la
precariedad a diario. Así podríamos también responsabilizarnos de las graves
condiciones en las que viven otras personas y por las que hasta ahora nos hemos
interesado poco o nada”.
Hay que promover la salud, y hacerlo
con justicia. Entonces trabajaremos para que todas las personas, vivan en
países ricos o en países pobres, tengan acceso a medidas de higiene, medicinas,
atenciones sanitarias, y todo aquello que permite evitar enfermedades y recibir
siempre la mejor ayuda posible.