Volver a la realidad
P. Fernando Pascual
12-2-2022
Existen diversos modos de huir
de los problemas, de esconderse ante los males de uno mismo o de otros, de
escabullirse ante la dureza de los hechos.
Drogas, juegos compulsivos,
imágenes vertiginosas, abuso de bebidas alcohólicas, son algunos de los modos
para huir de la realidad y arrojarse a distracciones absorbentes.
Sin embargo, tarde o temprano
la realidad se impone. La enfermedad está allí. La crisis económica no ha
terminado. El fracaso en el hogar o el trabajo golpea nuestro corazón y
cuestiona el sentido de nuestros escapismos.
Lo que ocurre a nivel de las
personas también ocurre en sociedades que cierran los ojos a la dureza de los
hechos y buscan con frenesí “pan y circo” para evitar la dura tarea de
enfrentarse con problemas que tarde o temprano afectan a todos.
Frente al escapismo, la
irresponsabilidad, la cobardía, la pereza, hace falta volver a la realidad,
afrontarla en todos sus retos, sus dificultades, sus misterios.
En esa realidad hay recursos y
hay amenazas, hay oportunidades y hay espejismos, hay colaboradores y hay
perezosos.
Lo importante es analizar las
situaciones, identificar lo más importante en cada momento, escoger los mejores
medios, y empezar a trabajar.
No siempre habrá resultados,
pero al menos ya tenemos la mente, el corazón y las manos (usando tres palabras
que cita con frecuencia el Papa Francisco) orientados hacia los retos que la
realidad nos presenta ahora.
Tras poner manos a la obra, lo
más importante quedará en el corazón de Dios, que conoce qué es lo que más nos
conviene, y que siempre acompaña a quienes, con buena voluntad, trabajan
humilde y confiadamente por acometer los retos de cada día, mientras abren el
mundo y la historia a la acción salvadora de Cristo.