NAVIDAD 2019
REFLEXION
Ya estamos en el tiempo más precioso de nuestro Calendario Litúrgico: El
Adviento.
Estamos esperando el nacimiento de la persona más importante de la historia
para el mundo cristiano. Ese hombre que nació humilde, vivió humilde, y sin
embargo, con su muerte pago por nuestra salvación.
Si nosotros, los cristianos, meditásemos cada día en el ejemplo de humildad que
nos enseño el MAESTRO, no existiría la soberbia que
está devorando a la humanidad, en la que desafortunadamente, la lucha por ser
el principal, el poderoso o el más importante, es visto por el mundo con
naturalidad; opacando así, la esencia intrínseca del pecado.
Este es un tiempo de alegría y de reflexión. Este es un tiempo de ofrecerle al
Señor esa parte débil que rompe nuestra comunión con El.
Miremos a nuestra familia, a nuestros amigos, a nuestros vecinos, a nuestros
semejantes como Dios nos mira a nosotros. No somos superiores a Dios. Amémoslos
como el ejemplo más grande de amor que tenemos: La Sagrada Familia.
Hace falta que el mundo se llene de humildad. Humildad no es una condición ni
económica, ni social o de origen. Humildad es una virtud, a la que todos
como cristianos, ricos y pobres, tenemos la obligación de aspirar.
Hagamos siempre un esfuerzo por acercarnos cada día más al agrado de Dios.
Feliz Navidad 2019.
VIVA CRISTO REY DIOS BENDIGA
AMERICA UNA
NACION BAJO DIOS.
Diego Quiros, Sr.