Voz del Papa
Después de la JMJ en Panamá
José Martínez Colín
1) Para saber
Durante
la Audiencia General del 30 de enero, el Papa Francisco recordó su viaje
apostólico a Panamá con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). El
Santo Padre mencionó que esta JMJ tuvo una fuerte huella mariana porque el tema
eran las palabras de la Virgen al ángel San Gabriel: “He aquí la sierva del
Señor, se cumpla en mi según tu Palabra”. Fue gratificante y fuerte escuchar
estas palabras pronunciadas por los representantes de los jóvenes de los cinco
continentes, y sobretodo verlas mostrar en sus caras.
Se
ha propuesto a María como aquella que, en su pequeñez, más que cualquier otro,
ha ‘influido’ en la historia del mundo, y “mientras haya nuevas generaciones
capaces de decir "aquí estoy"
a Dios, habrá futuro en el mundo”, afirmó el Papa.
2) Para pensar
Como
en cada JMJ, se rezó el viernes junto al Papa el Vía crucis, quien recomendó
rezarlo con frecuencia, pues “caminar con María detrás de Jesús que lleva la
cruz es la escuela de la vida cristiana: allí aprendemos a amar como Jesús y
María”.
El
Papa quiso compartir una confidencia personal: “A mí me gusta mucho hacer el Vía
Crucis, porque es ir con María detrás de Jesús, y siempre lo llevo conmigo para
rezarlo en cualquier momento. Un Vía Crucis de bolsillo que me lo ha regalado
una persona muy apostólica en Buenos Aires y cuando tengo tiempo, lo tomo y
sigo el Vía Crucis… hagan ustedes el Vía Crucis porque es seguir a Jesús con
María en el camino de la Cruz donde Él ha dado la vida por nosotros, por
nuestra redención. En el Vía Crucis se aprende el amor paciente, silencioso y
concreto”, señaló el Papa.
Acogiendo
la invitación que nos hace el Papa, procuremos rezar la oración del Vía Crucis,
con la ventaja de poder también tener uno de bolsillo, sea en papel o digital
en un dispositivo electrónico.
3) Para vivir
El
Santo Padre destacó el gesto de los numerosos padres y madres que alzaban con
los brazos a los niños cuando pasaba el papamóvil como diciendo: “he aquí mi
orgullo, he aquí mi futuro”. Y comentó: “¡Cuánta dignidad en este gesto y
cuánto es elocuente para el invierno demográfico que estamos viviendo en
Europa! El orgullo de esa familia son los niños, la seguridad de esa familia
son los niños, el invierno demográfico sin hijos es difícil, ¿no?”, expresó.
Los hijos son un don de Dios, un bien y una alegría para la familia.
De
acuerdo al Papa Francisco, “el culmen de la JMJ y del viaje” fue la Vigilia del
sábado por la noche y la Misa del domingo donde los jóvenes pasaban del
entusiasmo a la escucha y a la oración en silencio. En esa oración Cristo nos
habla y nos llama a vivir el Evangelio en el ‘hoy’, porque “los jóvenes no son
el ‘mañana’, son el ‘hoy para el mañana’, no son el ‘mientras tanto’ sino el
hoy, el ahora de la Iglesia y del mundo”, concluyó el Papa. Procuremos, pues,
vivir al día un momento para escuchar a Cristo.
José Martínez Colín es sacerdote, Ingeniero (UNAM) y
Doctor en Filosofía (Universidad de Navarra). (articulosdog@gmail.com)