Sobre la idea de la tierra
plana
P. Fernando Pascual
21-12-2017
Algunas personas, desde ideas
difundidas en el siglo XIX, afirman que en la Edad Media la gente creía que la
tierra era plana.
Si uno profundiza en los
documentos antiguos y en algunos estudios recientes sobre este punto,
constatará que los medievales, como muchos autores del mundo griego y romano,
pensaban que la tierra era esférica.
Bastaría con recordar que,
entre los antiguos, Platón, Aristóteles, Arquímedes, Eudoxo,
Eratóstenes y Tolomeo, creían que la tierra era esférica. No todos pensaban lo
mismo, pues autores como Tales, Anaxímenes, Anaxágoras y Leucipo supusieron que
la tierra era plana o cilíndrica.
En el mundo medieval, hubo
pocos autores que sostuvieron que la tierra fuese plana. En el ámbito latino,
podemos recordar a Lactancio (siglo IV d.C.). En el
ámbito de cultura griega, Cosmas Indicopleustes
(siglo VI d.C.) defendió que la tierra era plana, si bien este autor fue
prácticamente desconocido para los latinos.
En cambio, la mayoría de los
cristianos medievales suponían que la tierra era esférica. Se podrían
mencionar, en ese sentido, a autores como Orígenes, san Ambrosio, san Agustín,
san Isidoro de Sevilla, san Alberto Magno, santo Tomás de Aquino, y otros.
Entonces, ¿de dónde surge la
idea tan difundida según la cual los medievales creían en una tierra plana? De
una obra publicada en los Estados Unidos el año 1828 con el título "History of the Life and Voyages of Christopher Columbus" (Historia de la vida
y viajes de Cristóbal Colón) escrita por Washington Irving.
Irving imaginaba en su obra
las tensiones entre un Colón que creía que la tierra era redonda y unos
marineros aterrados que se resistían a seguir el viaje hacia el Oeste por
pensar que llegaban al final de una tierra plana. Tales tensiones, sin embargo,
eran inventadas y no tienen ningún fundamento histórico.
Posteriormente, otras obras
difundieron el mito de que los medievales creían en la tierra plana, y no
faltaron libros de estudio que repitieron la idea hasta llegar a la mente de
millones de personas.
Para contrarrestar el mito y
para explicar mejor la realidad, podemos recordar una sencilla obra publicada
por Jeffrey Burton Russell con el título "Inventing
the Flat Earth: Columbus
and Modern Historians" (New York 1991).
A un nivel más divulgativo,
pueden consultarse dos artículos. Uno de Umberto Eco
("La solita storia della
terra piatta", 2005);
y otro de Thomas E. Woods, Jr. ("The Flat Earth Myth. The real myth is the idea that anyone ever believed in a flat
earth", 2005).
A la vista de estos estudios,
lo mejor que podemos hacer ante quien todavía cree que los medievales pensaban
que la tierra era plana es invitarle a la lectura de los documentos antiguos y
medievales, y estudios recientes sobre el tema.
Siempre es una sorpresa
agradable reconocer que uno estaba equivocado y avanzar hacia un mejor
conocimiento de los hechos del pasado. Así podemos formarnos una idea más
exacta de cómo pensaban y vivían los estudiosos de otras épocas de la historia
humana, también en lo que se refiere a la configuración del planeta en el que
transcurrimos nuestra vida terrena.