Voz del Papa
Trabajar la caridad en Adviento
José Martínez Colín
1) Para saber
El Papa Francisco nos propone tres actitudes para este tiempo
de Adviento: “Vigilantes en la oración, trabajadores en la caridad y
exultantes en la bendición”.
En la ocasión pasada comentamos la primera, ahora
reflexionaremos sobre la segunda: la caridad. Si tratamos al Señor
en la oración, una consecuencia será que nos infundirá su Amor, y
ese amor lo demos a los demás.
2) Para pensar
No suele estar en nuestras manos resolver problemas
mundiales, pero basta con poner amor en cada momento. Un relato
nos lo muestra.
Un día, en un pueblo pequeño, un muchacho pobre que
vendía mercancías de puerta en puerta para pagar sus estudios
universitarios de medicina, se encontró sin dinero y tenía hambre.
Desesperado decidió pedir comida. Tocó a una casa humilde, y
sus nervios lo traicionaron cuando una encantadora mujer joven le
abrió la puerta. En vez de comida pidió un vaso de agua. Ella notó
que tenía hambre, así que le trajo un gran vaso de leche. Lo bebió
despacio, y le preguntó: “¿Cuánto le debo?” Ella contestó: “No me
debes nada. Mi madre nos ha enseñado a nunca aceptar pago por
una caridad”
El joven le dijo: “Entonces, te lo agradezco de todo corazón”.
Cuando Howard Kelly se retiró, se sintió más fuerte; estaba
por rendirse y dejar todo, y ahora su fe en Dios y en los hombres
era más fuerte.
Muchos años después esa mujer enfermó gravemente. Los
doctores locales estaban confundidos y la enviaron a la gran ciudad.
Ella viajó. Llamaron al mejor doctor, Howard Kelly, para
consultarle. Cuando este oyó el nombre del pueblo de donde venía,
una extraña luz lleno sus ojos. Inmediatamente subió al cuarto.
Vestido con su bata entró y la reconoció enseguida. Se propuso
hacer lo mejor posible para salvar su vida. Desde ese día le prestó la
mejor atención. Después de una larga lucha, ella ¡ganó la batalla!
¡Estaba totalmente recuperada!
El Dr. Kelly pidió a la administración del hospital que le
enviaran la factura total de los gastos para aprobarla. El la revisó y
firmó, escribiendo algo en el borde de la factura y la envió a la
paciente.
La cuenta le llegó a la mujer, pero temía abrirla. Sabía que le
tomaría el resto de su vida poder pagar todos los gastos.
Finalmente la abrió, y algo llamó su atención: En el borde de
la factura leyó estas palabras: “Pagado por completo hace muchos
años con un gran vaso de leche”. (Firmado) Dr. Howard Kelly.
Lágrimas de alegría inundaron sus ojos y su feliz corazón oró
así: “Gracias, Dios. Porque tu amor se ha manifestado en las manos
y los corazones humanos”.
El Dr. Howard sí existió y fue un muy prestigioso médico y
cofundador de un reconocido hospital en los Estados Unidos.
3) Para vivir
Para cumplir el propósito de vivir la caridad este Adviento,
como nos dice el Papa, hace falta mirar más a nuestro alrededor,
descubrir que los demás están más necesitados que uno, y saber
encontrar el rostro de Cristo en ellos, recordando sus palabras:
“Porque tuve hambre y me dieron de comer; tuve sed y me dieron
de beber; estuve enfermo y me visitaron…” (cfr. Mt 25, 36).
Si logramos hacerle pasar un momento agradable a una
persona enferma o sola, estos días navideños, estarán impregnados
de espíritu cristiano.
José Martínez Colín es sacerdote, Ingeniero (UNAM) y Doctor en Filosofía (Universidad de Navarra)
( articulosdog@gmail.com )