Voz del Papa
El perdón unifica la familia
José Martínez Colín
1) Para saber
Una de las causas de mayor conflicto entre los esposos,
incluso llegando a propiciar querer el divorcio, es la falta de perdón
entre los cónyuges. Cada uno espera que sea el otro quien pida
perdón, espera que sea el otro cónyuge quien dé el primer paso y
reconozca su culpa. A veces también se da que, incluso, aún en el
caso de que uno pida perdón, no se lo concedan: “Cuántas familias
divididas por no perdonarse: ¡cuántas familias! Hijos alejados de sus
padres, marido y mujer alejados… es tan importante pensar en
esto: si yo no perdono no tengo, parece que no tengo derecho
-parece- de ser perdonado o no he entendido qué cosa significa que
el Señor me haya perdonado”, indic￳ el Papa Francisco.
Luego señaló que todos los cristianos deberían saber perdonar
“siempre”. Record￳ que Jesús invita a hacerlo “siete veces en un
día” si quien nos ha hecho una falta nos los pide arrepentido.
Perdonar incluso “setenta veces siete”, significando que ha de ser
siempre. Jesús quiere “hacernos entender la importancia del
perd￳n”, porque un cristiano que no es capaz de perdonar, no es
cristiano. Hay que aprender a pedir perdón y a saber darlo siempre.
2) Para pensar
En una ocasión presentaron en la televisión a un palestino,
cuyos hijos habían muerto "accidentalmente" durante un ataque
israelí, y que ahora inauguraba una fundación para promover el
entendimiento entre árabes e israelíes.
Le preguntaron por qué colaboraba y respondió:
"Precisamente porque mis hijos están muertos. Ya no tengo ninguna
responsabilidad hacia ellos, sino hacia los que viven. Quiero
asegurarme de que esto no vuelva a ocurrir. Quiero predicar con el
amor y no con el odio".
3) Para vivir
El Papa Francisco nos recuerda que “debemos perdonar,
porque somos perdonados. Y esto está en el Padre Nuestro: Jesús
nos lo ha enseñado ahí. Y esto no se entiende en la lógica humana
que te lleva a no perdonar, a la venganza; te lleva al odio, a la
divisi￳n”.
Por eso los discípulos le pidieron al Se￱or: ‘Auméntanos la fe’.
Y es que solamente con la luz de la fe podemos hacerlo: “De la fe
en un Padre misericordioso, de un Hijo que ha dado su vida por
nosotros, de un Espíritu que está dentro de nosotros y nos ayuda a
crecer, la fe en la Iglesia, la fe en el pueblo de Dios, bautizado,
santo. Y esto es un don, la fe es un regalo. Ninguno con los libros,
asistiendo a conferencias, puede tener la fe. La fe es un regalo de
Dios que te dan y por esto los apóstoles pedían a Jesús:
‘Auméntanos la fe’”, concluyó.
San Josemaría nos invita a considerar el perdón de Dios para
agradecérselo y corresponder: “Qué deuda la tuya con tu Padre
-Dios!- Te ha dado el ser, la inteligencia, la voluntad...; te ha dado
la gracia: el Espíritu Santo; Jesús, en la Hostia; la filiación divina; la
Santísima Virgen, Madre de Dios y Madre nuestra; te ha dado la
posibilidad de participar en la Santa Misa y te concede el perdón de
tus pecados, ¡tantas veces su perdón!; te ha dado dones sin cuento,
algunos extraordinarios...
-Dime, hijo: ¿cómo has correspondido?, ¿cómo correspondes?”
(Forja n.11).
Al igual que los apóstoles, habría que incluir en nuestras
oraciones diarias una petición para que el Señor aumente nuestra
fe.
José Martínez Colín es sacerdote, Ingeniero (UNAM) y Doctor en Filosofía (Universidad de Navarra)
( articulosdog@gmail.com )