Fieles y prudentes administradores
El Papa Francisco ha creado una Secretaría de Economía para la Santa Sede. El
organismo se crea en función de una misión específica, que no es ajena en absoluto
a la misión de la Iglesia, y en línea con la voluntad de transparencia que la propia
Iglesia viene demostrando.
Tal como ha señalado el Papa en una Carta Apostólica, con forma Motu Proprio, la
Iglesia ha de ser consciente de la responsabilidad de proteger y gestionar con
atención sus bienes, a la luz de su misión evangelizadora y con una atención
especial a los más necesitados. Por eso la gestión de la economía en la Santa Sede
está estrechamente ligada a su misión específica, no sólo por el ministerio universal
del Santo Padre, sino también en relación con el bien común, en la perspectiva del
desarrollo integral de la persona humana. Se trata, en definitiva, de ser como en el
parábola del Evangelio, administradores fieles y prudentes que tienen la delicada
tarea de cuidar atentamente aquello que les ha sido confiado.
Jesús Domingo Martínez