Todos en camino
En el Ángelus del primer domingo de Adviento que rezó el Papa Francisco en la
Plaza de San Pedro, explicó que se inicia de este modo un nuevo año litúrgico para
el Pueblo de Dios en el que Jesucristo nos guía en la historia hacia el cumplimiento
de su Reino.
Para el Papa, este tiempo “nos hace experimentar un sentimiento profundo del
sentido de la historia, puesto que redescubrimos la belleza de estar todos en
camino: la Iglesia, con su vocación y misión, y la humanidad entera, los pueblos,
las civilizaciones, las culturas, todos en camino a través de los senderos del
tiempo”.
Se trata según el Papa de una peregrinación universal hacia una meta común, que
en el Antiguo Testamento es Jerusalén y así como en la vida de cada uno de
nosotros siempre hay necesidad de volver a partir, de volver a levantarse, de volver
a encontrar el sentido de la meta de la p ropia existencia, de la misma manera para
la gran familia humana es necesario renovar siempre el horizonte común hacia el
cual estamos encaminados. ¡El horizonte de la esperanza! Porque el tiempo de
Adviento, que nuevamente comenzamos, nos devuelve el horizonte de la
esperanza, una esperanza que no decepciona puesto que está fundada en la
Palabra de Dios. Sin olvidar que “el modelo de este modo de ser y de caminar en la
vida, es la Virgen María. ¡Una sencilla muchacha de pueblo, que lleva en su corazón
toda la esperanza de Dios!”, palabras con las que acabó Francisco.
Jesús Domingo Martínez