Los dictadores posmodernos
En una democracia -en las dictaduras ya sabemos cómo se las gastan- nadie tiene
libertad para matar, para coaccionar, para adoctrinar, para imponer su voluntad.
Como máximo, las ideas se proponen, se aceptan o se rechazan. Por eso, con toda
legitimidad, se puede decir de los que matan, coaccionan y adoctrinan son tan
reaccionarios como los dictadores, tan criminales como los filonazis. Las
interrupciones voluntarias de la vida son consecuencia de una perversión de la
libertad, es decir, de los dictadores posmodernos. De modo, que no tiene sentido
que se molesten los abortistas si alguna vez son comparados con los liberticidas,
con los nazis, con los estalinistas, con los castristas, con los norcoreanos o con los
islamistas radicales… ¿Donde está la diferencia?
Jesús Domingo Martínez