El verdadero poder es el servicio
Como ya sabemos el Papa Francisco celebró la Misa de inauguración de su
pontificado el 19 de marzo, solemnidad de San José. Como él mismo ha
subrayado, una coincidencia muy rica de significado, que le ha permitido
acercarnos la figura del patrono de la Iglesia Universal y adentrarse en la
misión de ser custodio, que es la que Dios confía a José. Una tarea que
desarrolla con humildad, en silencio, pero con una presencia constante y
una fidelidad total, también cuando no comprende.
Y es que todos, creyentes y no creyentes, estamos llamados a esa
vocación, a esa tarea de ser custodios de los dones de Dios, sabiendo
responder a esa llamada, con disponibilidad y prontitud, con particular
atención a los más frágiles, que a menudo quedan en la periferia de
nuestro corazón, pero sabiendo también que el centro de la vocación
cristiana es Cristo. Si guardamos a Cristo en nuestra vida, podremos
guardar adecuadamente a los demás, salvaguardar la creación entera. El
preocuparse, el custodiar, requiere bondad, pide ser vivido con ternura.
Jesus Domingo Martinez