¿Ha de ser un superhombre?
Las quinielas y cávalas que se hacen sobre el próximo Papa y las características que
debe reunir olvidan que no ha de ser un superhombre, pues la Iglesia sabe que el
Sucesor del apóstol Pedro debe ser por encima de todo un enamorado de Cristo.
Debe tener una profunda fe y al mismo tiempo conocer profundamente al hombre
de nuestro tiempo. Este perfil no tiene nada que ver con una especie de, repito,
superhombre: recordemos quién era Pedro, el pescador de Galilea.
Los desafíos que tiene ante sí la Iglesia para acercar a los hombres a Dios en medio
de las turbulencias de una cultura que propone justo lo contrario, van a exigir del
nuevo Papa el ejercicio valiente de todas esas virtudes humanas además de vivir en
alto grado las teologales de fe, esperanza y caridad, características de todo fiel
cristiano. El pasado día 8 leía una frase que puede servir como broche de oro, es la
imagen recogida en un colegio expresada por un niño de siete años: “el nuevo Papa
debe ser el que mejor se sepa a Jesús”.
Jesús Domingo Martínez