Uno de los principales males morales de nuestros días
“Digámoslo claramente: la corrupción en la vida pública es uno de los principales
males morales de nuestros días” dijo el obispo Munilla. A pesar de todo invitó a los
presentes en una reunión a realizar un examen de conciencia para que todos
pudieran reflexionar sobre el tema. ”Sinceramente, ¿somos nosotros honestos en
nuestra relación con el dinero, a nuestro nivel y en nuestras circunstancias?” El
clima de sospecha llega a ser tan generalizado que no es difícil escuchar este tipo
de expresiones: “todos son iguales”, “todos son unos corruptos”, “todo el mundo
tiene su precio” etc. Aunque muchos días tienes la sensación de que es cierto, hoy
mismo en los diarios de mi provincia no hay página en la que no se hable de un
caso de corrupción a nivel local y comarcal, además de los nacionales y
autonómicos. No es bueno generalizar pero también hay que empezar a actuar
honestamente para que podamos confiar un poco los unos en los otros, sin esa
confianza no podremos empezar a construir relaciones sanas y duraderas para con
España y con el que está al lado. Con todo hay que considerar que se trata de uno
de los principales males morales de nuestros días .
Jesús Domingo Martínez