No financiar investigaciones que destruyan embriones
Dentro de la batalla sobre la financiación pública de la investigación con embriones
humanos, la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo adoptó el
pasado mes de septiembre una decisión importante a favor de la vida. La Comisión
aprobó un informe del eurodiputado popular polaco Piotr Borys sobre los riesgos de
financiar determinados trabajos científicos. Tuvo muy en cuenta la sentencia del
Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) del 18 de octubre de 2011, que
rechazó la posibilidad de patentar técnicas relativas a embriones y células madre
que llevasen a su destrucción, como sucede en la mayoría de los supuestos. El
apoyo parlamentario ha sido amplio: votaron a favor populares y verdes –como se
recordará, el asunto llegó a la Corte de Luxemburgo por iniciativa de Greenpeace
de Alemania–, así como algunos liberales, socialistas y euroescépticos.
Las enmiendas aprobadas establecen que no sea financiada por la UE “la
investigación que implique la destrucción de embriones humanos, ni la que utilice
células madre embrionarias humanas”. A￱aden que “es conveniente que la
Comisión apoye activamente la investigación dirigida a desarrollar alternativas a las
células madre embrionarias”. ¿Ahora qué harán con los miles de embriones
congelados procedentes de la fecundaci￳n “in vitro” que los progenitores no
desean mantener? ¿Matarlos? Es que cuando se vive de espaldas a la vida podemos
acabar encontrando problemas tan graves como este.
Jesús Domingo Martínez