Peregrino “de solidaridad, de unidad y de compasión”
Ante los continuos rumores y temores de que los brotes de violencia en Siria
pudieran obligar a la cancelación del viaje de Benedicto XVI a Líbano, esté confirmó
personalmente que mantendría su viaje del 14 al 16 de septiembre, con el objetivo
de enviar un mensaje de paz y unidad a los cristianos de esa región de Medio
Oriente, que visitó por primera vez en mayo de 2009 cuando estuvo en Jordania,
Israel y los territorios ocupados. Se recordaba a este respecto que la visita del Papa
obedecía también a una invitación oficial del presidente de la República, el maronita
Michel Sleiman, que había puesto en marcha todos los dispositivos de seguridad
posibles para que todo transcurra sin sobresaltos.
El Papa, llegó al Líbano como “peregrino de solidaridad, de unidad y de compasión”,
firmó la exhortación postsinodal (documento final) de la Asamblea Especial del
Sínodo de Obispos para Oriente Medio, sínodo celebrado en octubre de 2010 en el
Vaticano, entregó el documento a los prelados, se reunió con las autoridades
libanesas, mantuvo un encuentro con los jóvenes del país y celebró una misa al aire
libre en Beirut. El programa de la visita del Papa al Líbano incluía también
encuentros con intelectuales, políticos, diplomáticos y representantes de todas las
confesiones religiosas, especialmente cristianos, musulmanes y judíos. Este ha sido
el 24º viaje al extranjero de Benedicto XVI, después del realizado del 23 al 28 de
marzo pasados a México y Cuba. Cabe esperar que este esfuerzo produzca frutos
espirituales i materiales
Jesús Domingo Martínez