La que pudo ser Primera Dama británica
Últimamente nos llegan noticias de conversiones y vocaciones de personajes que
han sido famosos, pero que en un momento de sus vidas el Señor les llama a
seguirles más de cerca.
En concreto me estoy refiriendo a un correo que me ha llegado de
Religiónenlibertad.com, y, entre otros artículos me he detenido en el que comenta
que la que fuera novia de David Cameron, en los años 90, Laura Adshead, deja la
fama y se convierte en monja de clausura.
Tras romper su relación con el político, la joven y bella Laura dejó su trabajo de la
sede del Gobierno británico para estudiar en la Escuela de Negocios Wharton en
Filadelfia, donde llegó a ocupar el cargo de directora general de la exitosa agencia
de publicidad Ogilvy & Mather. Estuvo a punto de ser contratada como estrella de la
serie de televisin “Mad”. Pero en el ao 2008, insatisfecha por su vida de glamour
y frivolidad, comienza un camino espiritual que desemboca en la decisión de dejar
el mundo y tomar los hábitos.
Comenta que hablando con su madre le dijo: “Voy a entrar a un convento”, a lo que
ésta le contest: “Sí, veo que este mundo ya no tiene un significado real para ti”.
En el convento de Saint Benedict, de Estados Unidos, la hermana John Mary tiene
una historia que la diferencia de las otras. Y, es que Laura Adshead, hoy podía
haber sido la Primera Dama británica. Pero ha cambiado todo por su modesto
hábito negro y vivir en clausura.
Es cierto que Dios siempre escucha y responde, sólo que hay que estar con el oído
y el corazón muy atentos para oírle. Los planes divinos, forjados desde la eternidad
para nosotros, son los más bellos que nunca pudimos imaginar, aunque alguna vez
nos desconcierten.
Elena Baeza Villena