La verdadera crisis de la Iglesia
Tras afirmar que la verdadera crisis de la Iglesia en el mundo occidental es una
crisis de fe, y que si no se llega a una verdadera renovación en la fe, toda reforma
estructural será ineficaz, Benedicto XVI aludió nuevamente a las personas que les
falta la experiencia de la bondad de Dios aludiendo a la búsqueda de nuevos
caminos de evangelización, que se pueden dar en ámbitos que aunque puedan ser
reducidos son capaces de actuar un nuevo acercamiento de la Iglesia a la sociedad:
“Estamos llamados a buscar nuevos caminos de evangelización, caminos que
podrían ser pequeñas comunidades donde se vive la amistad que se profundiza
regularmente en la adoración comunitaria de Dios. Aquí hay personas que hablan
de sus pequeñas experiencias de fe en su puesto de trabajo y en el ámbito familiar
o de los conocidos, testimoniando de este modo un nuevo acercamiento de la
Iglesia a la sociedad. A ellos les resulta claro que todos tienen necesidad de este
alimento de amor, de la amistad concreta con los otros y con Dios. Pero sigue
siendo importante la relación con la sabia vital de la Eucaristía, porque sin Cristo no
podemos hacer nada (cf. Jn 15, 5). Queridos hermanos y hermanas, que el Señor
nos indique el camino para ser siempre luz del mundo y para mostrar a nuestro
prójimo el camino hacia el manantial donde pueden satisfacer su más profundo
deseo de vida”. Puede ser un mensaje para profundizar durante la Cuaresma que
está a punto de comenzar.
Jesús Domingo Martínez