PUESTA DE SOL
Por los acantilados
De la isla de Ibiza,
Va ocultándose el sol.
La gente sale de sus casas
Esperando pasar la noche
Que en Ibiza sabe a día
Y a su tremenda diversión.
Cuando salía del barco
Por la bahía de Ibiza,
El sol parecía un novio
Besando y saludando a gusto
A la serena y suave brisa.
¡Qué bonito es el sol
cuando por la montaña,
junto al Mediterráneo,
se pone y se oculta!
Parece que va llorando
Dejando tras de sí,
Penas y alegrías infinitas.
Dejaba que el sol
Lindamente me hablara
En una conversación amiga
De los mares, cielos y playas.
Y Dios en mi corazón brotaba
Como la ola más preciada.
Felipe Santos, padrecito salesiano
Poema diario