Llorar por ti

Autor:  Diácono Lorenzo Brizzio 

 

Secos están mis ojos de lágrimas…

Ellas regaron el duro suelo de la realidad…

Duro suelo como el corazón tuyo…

Se mojo el suelo cuando tus labios dijeron “ya no te quiero”…

 

Se partió el corazón mío dentro del pecho…

Ciego mis ojos de visión quedaron…

Mis piernas sin fuerzas se doblaron y de hinojos caí…

Los ojos míos dejaron caer a raudales las lágrimas mías…

 

Hoy pasado el ya el duelo de mi dolor…

Puedo aún con ojos empañados de dolor y resignación…

Volcar en el papel, estas letras  para recordar tu desamor…

Pidiendo a Dios que ellas “curen las heridas” en mí…

 

Él, Dios, me lo hizo saber al caer yo,  de rodillas allí frente a la Cruz…

Cuando le conté el secreto de mi vida y de mi dolor…

Puso en mi alma, con bondad de Padre, el bálsamo del perdón…

Por ello te he perdonado vida mía, ve en tu paz, yo tengo la mía…